viernes, 2 de febrero de 2007

Sí, definitivamente hablo tantos idiomas que ni yo misma me entiendo. Me reitero en las formas, en los fondos y en las intenciones.
Me siento muy cansada y quiero bostezar y dormirme al pie de la parra que hay en el camino. Dar un par de bocados al racimo y dejarme llevar plácidamente hasta que caiga el sol. Y luego caminar.
Sola. A oscuras. Silenciosa.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

cierto... quien escribe con sangre desea ser leido con sangre. saludos

Anónimo dijo...

tengo problemas con mi blog. regreso cuando este bien. no me gusta aparecer como anonima pero no tuve otra opcion.

el simio en tu armario dijo...

Te esperamos :-)